¡Feliz Navidad, Feliz año Nuevo!
Gracias por acompañarme un año más en este viaje maravilloso a bordo de un planeta en pleno universo #9. Dónde todo es posible y las historias más tristes son también las más cómicas.
¿Qué pasó todos estos meses? La universidad, el portugués, los proyectos independientes, la gata, todo eso y lo que les voy a contar en esta entrada.
2013 fue terrific (y más que hablar de su traducción literal, quiero hacer énfasis en la posible raíz terr ej. terrible, terror, terrestre). Año de la serpiente. Espero que todos hallamos experimentado en cierta medida ese cambio de piel.
Vídeo: Serpientes cambiando de piel (El vídeo no es mio)
Emociones fuertes fueron las que trajo este año: La visita de mi madre, le predefensa de terror, el concurso de ensayo del Min. de Relaciones Exteriores del Brasil, la participación en la producción del videoclip #LALALA de Naughty Boy, la BICeBe 2013, APOCALIPSIS LOS ANDES.
Mi proyecto más ambicioso hasta el día de hoy. Muy intenso. Quiero aprovechar de agradecer a todos los actores, actrices y personas que contribuyen a la realización independiente de Apocalipsis Los Andes. Muchas gracias.
Apocalipsis Los Andes me enseño el vínculo entre escribir y dirigir. Descubrí mis carencias y mi propio potencial. Potencial que pude emplear y plasmar en logros como mi tercera colaboración a la BICeBe y el primer premio del concurso de ensayo convocado por el min. de RR.EE. del Brasil.
No todo fue dulzura; mal año para el amor, amistades que se enfrían, pedos financieros, pedos familiares, relaciones profesionales desgastadas. Pero gracias, ahora he aprendido nuevas cosas útiles. Puedo escribir mejor y utilizar mis habilidades sociales para el bien y no para Múuunnnrrraaah.
Entre las cosas buenas y significativas que trajo este año una fue Munca, co-productor de Apocalipsis Los Andes, además de Giovanni Bello junto a José Villanueva, que me recordaron la razón por la que admiró tanto a W. Blake. Fue así como junté el coraje para editar y publicar tres poemarios, los que circularon en la segunda mitad del semestre en la ciudad de La Paz-Bolivia y me tuvieron también muy ocupado.
Comencé por el de la derecha, un romancero postmodernista fresco y entretenido; poco después en la biblioteca del CCBB encontré un libro titulado CONCRETISMO que me inspiró a componer el de la izquierda en octubre, antes de la publicación del artículo en Página 7, dónde me enteré que este año se cumple un importante aniversario de la poesía concreta. No quedé muy contento con el artículo pero saquen ustedes sus propias conclusiones. El formato de las obras de Hormigón Concreto está pensado para 150 cms x 150 pero las edité en un formato más pequeño para su publicación este año.
Finalmente, el del medio es una colección de haikus que curé de entre los que escribí a lo largo de mi vida. Entre todos comencé con la distribución de 10 cada uno y tuve que reeditarlas varias veces incrementando el número a 15, luego a 20 y finalmente a 25. ¡Gracias gente linda que está leyendo!
Así llegué a la navidad. Fue un año difícil pero me alegro. Ahora entramos al año del caballo. Y yo estoy listo: llevo un sangüich bajo el brazo, mucha cumbia y yeah yeah yeahs.
PD: A propósito de APOCALIPSIS LOS ANDES, estamos buscando un co-productor para los siguientes dos dramáticos capítulos (¿Alguien quiere?).